Tiempos difíciles usualmente suelen resolverse con soluciones radicales. Bajo esa lógica una figura explosiva como Donald Trump logró ocupar la presidencia de Estados Unidos, ahora con esa misma perspectiva, Zohran Mamdani se convertirá en el nuevo alcalde de Nueva York, algo impensable para una ciudad que a pesar de ser liberal siempre se ha arropado bajo la tutela de liderazgos más conservadores.
Y es que Mamdani cuenta con muchos de los rasgos que más pueden lastimar a un personaje como Trump: es hijo de migrantes, es musulmán, pertenece al ala de la izquierda liberal, además de haber nacido en el extranjero, más precisamente en Kampala, Uganda.
Este joven político, hasta hace un año prácticamente desconocido, vio su fama crecer gracias a un programa social que resultó muy atractivo para los ciudadanos que habrá de gobernar, basado en congelar alquileres por cuatro años en un millón de apartamentos; la creación de una red de supermercados públicos para reducir el precio de los alimentos; ampliar la red de autobuses y hacerla gratuita, así como ofrecer cuidado infantil sin costo para niños menores de cinco años.
Con un perfil muy alejado de la ostentosidad de Donald Trump, Mamdani supo ganarse la simpatía de los neoyorkinos poniendo por delante la diversidad, en una de las ciudades más cosmopolitas, combinando la identidad y política material mostrando autenticidad, una cualidad poco conocida entre los políticos de raza.
Pero quizá la mayor virtud que tuvo fue poder reconectar a amplios sectores de clase trabajadora que se habían alejado del Partido Demócrata. A diferencia de otros políticos, no solo elaboró diagnósticos sino que presentó soluciones tangibles sobre cómo financiar sus programas sociales cuyos costos habrán de correr por cuenta de los impuestos que habrán de incrementarse entre los más ricos, el sector que mayores beneficios ha obtenido de la administración de Trump. Aún falta ver cómo esto se habrá de concretar. El presidente ya amenazó con retener los fondos destinados a la ciudad.
Pero Mamdani no está exento de críticas. Expertos en el sector inmobiliario aseguran que congelar rentas podría perjudicar a pequeños propietarios y funcionarios de transporte estiman que la gratuidad costaría el doble de lo que él ha planteado, por lo que las cuentas no le saldrían, sin embargo, no es un mal comienzo en una ciudad abrumada por sus altos costos.
Un punto delicado será su relación con la numerosa comunidad judía (la mayor población fuera de Israel). Su histórico activismo pro Palestina genera temores sobre lo que pudiera llegar a convertirse en posturas hostiles, acusan sus detractores.
Al interior del Partido Demócrata, Mamdani se mira como una figura polémica. Podría convertirse en un activo importante para las elecciones de medio término por su facilidad para atraer jóvenes y comunidades migrantes en distritos urbanos. Del otro lado su plataforma socialista facilita que la derecha intensifique sus ataques contra el “radicalismo” demócrata.
Para muchos la oportunidad de reconfigurar un agotado Partido Demócrata y la esperanza de que las cosas pueden ser diferentes.
Incendio en Waldo’s: ley no supervisada…
El primer sábado de noviembre fue de tragedias nacionales. Por la tarde, una explosión y posterior incendio en una sucursal de Waldo’s en Hermosillo, Sonora, dejó un saldo de 23 muertos -seis menores, doce mujeres y cinco hombres-, y una docena de heridos. Por la noche, fue asesinado el presidente municipal de Uruapan, Carlos Manzo.
La indignación local y nacional en torno al homicidio del munícipe y el contexto de inseguridad y violencia que vive Michoacán han prevalecido en la agenda política y mediática sobre el siniestro de la tienda de autoservicio, sin embargo, no debe pasarse por alto pues puso en evidencia las deficiencias en las gestiones de riesgo en materia de protección civil no solo de Sonora, sino de todos los estados.
Según las investigaciones, el incendio se debió a la explosión de un transformador en el interior de la tienda, equipo privado cuya inspección y mantenimiento correspondía a la empresa. Aunado a ello, la tienda operaba sin Programa Interno de Protección Civil que dejó de estar vigente desde 2021, sin actualizarse el análisis de riesgo, sin realizar simulacros y sin constancia de mantenimiento de equipo contra incendios. Las autoridades estatales habían rechazado el programa por incumplimientos, pero la tienda continuó inexplicablemente -o tal vez sí-, abierta, sin verificación ni sanción alguna. El resultado está a la vista.
De nada sirven normas y trámites de protección civil si no hay supervisión, correcciones, sanciones. Waldo’s tiene alrededor de 900 tiendas en México, de las cuales 68 están en Sonora, todas cerradas de manera provisional por el gobierno del estado para hacer lo que no hicieron por lo menos en cuatro años: revisar el cumplimiento de la normatividad de protección civil. Surgen las dudas: en Sonora, para variar un poco y ponerse a trabajar, ¿harán lo procedente con el resto de inmuebles privados y públicos?, ¿habrá sanciones penales contra los funcionarios públicos cuya indolencia y probable corrupción -junto con la de la empresa-, costó la vida de 23 personas?, y en los estados, ¿cómo van en la verificación de sus respectivas normas de protección civil?, ¿ya están revisando los Waldo’s?
En junio de 2009 se incendió la Guardería ABC, con 49 infantes muertos y más de cien heridos, implicando a autoridades municipales y estatales.
En 13 años, no se aprendió nada.
Crédito en la era digital, ¿estamos listos para la Generación Z?
El ecosistema del crédito en México atraviesa una transformación profunda impulsada por la digitalización y los cambios en el comportamiento del consumidor. El número de consultas anuales del historial crediticio por persona se ha duplicado en cinco años —de 2.8 en 2020 a 5.7 en lo que va de 2025—, reflejo de un usuario más informado y activo. Sin embargo, la tasa de conversión de consulta a crédito cayó de 36% a 29%, lo que muestra que los consumidores ya no se conforman con la primera opción: comparan, analizan y buscan propuestas que combinen conveniencia, confianza y experiencia.
Un análisis realizado por Círculo de Crédito, la Sociedad de Información Crediticia -más conocidos como burós de crédito-, revela que la Generación Z, los Millennials y la Generación X concentran el 96% de las consultas, con los Millennials liderando en participación y conversión. En contraste, la Generación Z, aunque representa el 32% de las consultas, tiene la tasa de conversión más baja (29%) y muestra la mayor fuga de clientes. Este comportamiento refleja el reto que enfrentan las instituciones financieras para conectar con un público joven, digital y demandante, que valora la personalización, la transparencia y la inmediatez por encima de la marca o la tradición.
A ello se suma un aumento en los riesgos asociados a los créditos digitales, como el incremento del créditos que nunca reciben un pago, que alcanzó 3% en 2023 y se concentra en la Generación Z. El desafío para el sector es equilibrar la seguridad con una experiencia fluida que no frene la inclusión financiera. En un entorno competitivo, atraer nuevos clientes ya no es suficiente, ahora la clave está en construir relaciones de confianza y ofrecer soluciones que respondan a las necesidades reales de cada generación. La transformación del crédito no solo es tecnológica, también es cultural.
Rojo de la Vega vs Ávila: política de bajo nivel
Es triste ver cómo la política en México dejó hace tiempo de ofrecernos debate de ideas para convertirse en acusaciones personales y desacreditaciones públicas en redes sociales. Es el caso de la disputa entre Alessandra Rojo de la Vega, alcaldesa en Cuauhtémoc, y el diputado federal por Morena, Arturo Ávila.
Todo derivó de una publicación en que el líder de los diputados guindas aseguró públicamente que la alcaldía Cuauhtémoc se encontraba sucia, insegura y abandonada por lo que la titular de la demarcación reaccionó de inmediato y acusó al legislador de mentir además de lanzar una declaración de guerra. Desde entonces, ambos han protagonizado un pleito que nada aporta a la política pública.
A la disputa se agregó la publicación de una consultora política, quien denunció haber recibido amenazas de muerte por parte de Ávila aparentemente por haber defendido el trabajo de Rojo de la Vega, quien sin pensarlo dos veces se subió a ese barco y calificó de despreciable la supuesta conducta del servidor público.
Sin embargo, después de que los cibernautas, así como el legislador y la propia alcaldesa dijeron haber realizado un análisis de los videos e imágenes, todo parece indicar que la supuesta amenaza de muerte es falsa debido a que los materiales digitales habrían sido alterados para acusar al morenista.
Acto seguido, la alcaldesa Rojo de La Vega salió a retractarse públicamente de sus señalamientos, además de mencionar que, en efecto, la supuesta amenaza habría sido falsa con lo que obtuvo un punto a su favor, pero el pequeño detalle que se le olvidó a la también activista fue ponerle nombre y apellido a la disculpa pública, ya que solamente dijo que se equivocó, pero no aludió para nada al diputado federal.
Pero lo que obtenemos de este pleito de vecindad, que verdaderamente es penoso, es que hoy día nuestros políticos han caído en el mundo de los ataques que no aportan ideas constructivas que reditúen en beneficios para la vida pública del país, sino que la gran mayoría se ha visto inmerso en descalificaciones personales que solo demuestran el bajo nivel de discusión que existe entre el oficialismo y la oposición de nuestro país.