“La chatarra es un motor económico para México” así lo señaló Miroslava Magaña, CEO y Fundadora de MM Chatarrera durante su participación en la Cumbre de las 1000 Empresas más Importantes de México.
En una charla enriquecedora con Arlenne Muñoz, Directora Grupo Mundo Ejecutivo; Magaña compartió como ha logrado consolidar su negocio en la industria de autotransportes, donde además de contribuir a la economía, genera un impacto positivo en el cuidado del medio ambiente.
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La empresaria encontró una oportunidad de negocio en la gestión de la chatarra que se localiza en los corralones; esto, en un contexto en el que la industria del autotransporte genera grandes cantidades de residuos derivados de los vehículos catalogados como ‘chatarra’ o basura industrial.
“En México somos de 4 a 6 millones de chatarreros. Es un oficio, un trabajo, que me encantaría que fuera una profesión, porque el impacto económico y de la derrama económica que deja, pues, la chatarra es gigante, es un motor económico”.
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Magaña explicó que la manera en que la compañía trabaja es promoviendo un programa de deschatarrización con las autoridades gubernamentales como la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México, para gestionar y movilizar la chatarra vehicular que hay en los corralones.
“La chatarra se encuentra en todas las dependencias del gobierno. Tenemos chatarra en los corralones, por ejemplo, aquí en la Ciudad de México, en el metro de la Ciudad de México, que son los vagones, los rieles, el cable. La chatarra no es igual, tiene clasificaciones: metales, aluminios, lámina, entre otros; y lo que hacemos es clasificar cada material, distribuirlo y venderlo al cliente final”.
Relevancia de la deschatarrización
Para la empresaria, la correcta gestión de la chatarra es fundamental, ya que estos residuos tienen un impacto no solo en el medio ambiente, sino también en la salud y la seguridad.
“Cuando tenemos corralones llenos de vehículos, se fomenta el robo, se fomenta la contaminación de todos los líquidos que se riegan en el piso, como la gasolina o el aceites. Si no llevamos procesos adecuados de estas sustancias, se corre el riesgo de que puedan explotar los corralones”.
Agregó que estos residuos también contaminan el subsuelo y los mares. Magaña refirió que, por ejemplo, los residuos de los barcos que ya están en desuso pueden llegar a contaminar los mantos acuíferos.
Colaboración con autoridades
Miroslava explicó que se han tenido acercamientos con diversas autoridades gubernamentales, a fin de apoyarlas en la tarea de deshacerse de estos residuos. Precisó que a través del reciclaje o la chatarrización, los gobiernos y dependencias pueden obtener ingresos para comprar camiones ecológicos, ambulancias o patrullas, o para cualquier otra necesidad que tengan.
“Llevamos ya 13 años tocando puertas en los gobiernos, realmente nos hemos convertido como en asesores, tanto del tema ambiental sobre el beneficio y los regalos económicos, y ahí es donde entra el proyecto sostenible, porque en diferentes municipios tenemos la chatarra abandonada, que nos deja un recurso económico, y si podemos hacer un programa junto con el gobierno o con empresas privadas para poder levantar esa basura, poderla comercializar y generar un ingreso”.
Finalmente, la CEO resaltó la necesidad de impulsar de manera conjunta, programas de deschatarrización, así como de reciclaje y otros proyectos sostenibles en los que participen la ciudadanía, el gobierno, las empresas y escuelas, en beneficio del medio ambiente.